Bosque de coches de Last Church, en Nevada

En las afueras de la antigua ciudad minera de Goldfield, en Nevada (Estados Unidos), cerca de la autopista 95, se encuentra el "bosque internacional de coches de Last Church", una inslatalación de arte de graffiti que cuenta con 40 vehículos, entre los que se pueden ver coches viejos, camiones y autobuses medio enterrados en medio del desierto. Estas instalaciones constituyen un acuerdo de colaboración entre Michael “Mark” Rippie y el artista Chad Sorg.

Michael Rippie, que es dueño de 80 hectáreas de terreno al lado de la carretera anteriormente citada, comenzó este proyecto en el año 2002, decidido a establecer un nuevo récord en el Libro Guiness de los Récords como la tierra del mundo con más coches "plantados" verticalmente en el suelo. Más tarde, a este intento de récord se le unión Chad Sorg.

Chad Sorg conducía su coche a través de Golfield cuando vió un vehículo que sobresalía del suelo. Estaba tan intrigado por este hecho, que le propuso a Rippie, la creación de obras de arte en sus coches "plantados".

A diferencia del Cadillac Ranch de Texas, donde los coches se plantan en el mismo ángulo que la pirámide de Giza, en Goldfield parece no haber ningún orden establecido. Algunos coches son enterrados, otros son apilados y otros, simplemente, están estacionados. Algunos de ellos se encuentran cubiertos por graffitis psicodélicos.

Este peculiar bosque de coches está abierto todo el año para poder disfrutar de él. Todos los vehículos que aquí se pueden encontrar fueron pintados por Michael Rippie y Chad Sorg, aunque desafortunadamente los dos artistas ya no trabajan juntos. Rippie está a día de hoy en la cárcel, tras haber sido condenado en noviembre del pasado año a dos años de prisión por violar las leyes de armas, mientras Song se encuentra en Reno, trabajando en un motel.