Ruinas del castillo Kilwaughter en Irlanda del Norte

El castillo de Kilwaughter se encuentra en el pueblo de mismo nombre, Kilwaughter, al suroeste de la ciudad de Larne, en el condado de Antrim, en Irlanda del Norte.

El castillo fue construido como una casa torre en forma de T, probablemente en el siglo XVII por la familia Agnew, en tierras que obtuvieron del rey Jacobo I de Inglaterra y VI de Escocia. Tenía 4 pisos de altura con torretas en las esquinas.

castillo Kilwaughter irlanda norte
Castillo de Kilwaughter en Irlanda del Norte.

Alrededor de 1803 la casa torre original fue remodelada y ampliada a una gran mansión. El responsable de la reforma fue el arquitecto John Nash, quien también diseñó la calle "Regent Street" de Londres, para la familia Agnew.

Los Agnew eran los recaudadores de impuestos del condado de Antrim.

La hija de la familia, Squire Agnew, se fue a Italia y allí se casó con un conde. Regresó a Kilwaughter alrededor de 1897 como condesa Balzani.

castillo Kilwaughter
Castillo de Kilwaughter en ruinas.

Durante la Primera Guerra Mundial, los oficiales estadounidenses heridos encontraron un lugar de descanso en el castillo de Kilwaughter, entonces el hogar de una compatriota estadounidense, la Sra. Elizabeth Galt Smith. Su familia arrendó y renovó el castillo durante más de 30 años, hasta 1922.

ruinas castillo Kilwaughter
Ruinas del castillo de Kilwaughter.

Durante la Segunda Guerra Mundial, el hecho de que el castillo fuera propiedad de la familia italiana Balzani, hizo que fuese declarado territorio enemigo. El castillo de Kilwaughter fue ocupado por soldados, incluidos, en 1944, miembros del "644° Batallón de Destructores de Tanques" estadounidense que se preparaban para el día D.

Después de la guerra, el castillo permaneció desocupado y gradualmente se fue reduciendo a ruinas.

Kilwaughter
Castillo de Kilwaughter.

En la actualidad, las ruinas del castillo Kilwaughter son parte de una granja. Los techos, los cuales originalmente estaban cubiertos con arena y alquitrán, se han derrumbado, al igual que los suelos.

Sus torres en ruinas y su interior derrumbado dan al castillo de Kilwaughter una atmósfera desolada e inquietante.






Entradas relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir