Dallol y sus lagos ácidos en Etiopía

¿Dónde crees que se encuentran estos paisajes? ¿Son reales? Estas no son imágenes de un planeta distante, ni escenarios de una película, ni photoshop... Existen en la Tierra. Hoy, en concreto, conocemos Dallol en Etiopía, el volcán más increíble e inusual de la Tierra.

Dallol se encuentra en el noreste de Etiopía, en la región de Afar, concretamente en la depresión de Danakil, a 48 metros bajo el nivel del mar.

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El volcán Dallol está rodeado de colinas de azufre natural que alcanzan una altura de 60 metros y... ¡son de colores sobrenaturales! Blanco, amarillo, turquesa y rojo son el resultado de la coloración de las sales de potasio por varios iones.

El hecho es que Dallol "guardó silencio" después de una gran erupción en 1926 y en el cráter del volcán se formaron peligrosos lagos ácidos. La constante presencia de gas le da a este lugar una atmósfera mística, que recuerda al aliento de monstruos espaciales. Con una paleta de colores como esta, Dallol está merecidamente incluido en la lista de los lugares más brillantes del planeta.

Los residentes locales otorgan a este cráter volcánico un misterio aún mayor. Cuenta la leyenda que Dallol es la puerta de entrada al infierno. Supuestamente, la ira de Dios arroja a todos los infieles y pecadores a este abismo, en cual les consume de inmediato. Esto no es difícil de creer cuando descubres que la temperatura promedio del lugar es cercana a los 40ºC, y en verano nunca baja de los 45ºC. Los colonos locales se consideran los guardianes del volcán. Dicen que perciben muy agresivamente a todos los que invaden sus vidas y, según se afirma, pueden ser extremadamente crueles en este aspecto.

Los científicos explican la forma única del volcán Dallol por la erupción del magma basáltico directamente por debajo del cuerpo del volcán. Su perímetro es de aproximadamente 3 kilómetros y se encuentra en la parte superior de una gran capa de sedimentos milenarios. La región es rica en depósitos de sales de potasio.

Los turistas que viajan a conocer Dallol no deben olvidar que este lugar es una atracción bastante peligrosa. Los pueblos alrededor del volcán están deshabitados y, a pesar de que puedan ser impresionantes y magníficamente bonitos, no se aconseja acercarse a los lagos ácidos.