Azulejos de la iglesia de Santa María de Válega en Ovar, Portugal

El esplendor artístico de los azulejos como elemento ornamental, plasmado tanto en exteriores como en interiores de edificios portugueses, se documentó por primera vez allá por el siglo XIII con el Monasterio de Alcobaça como protagonista.

Desde entonces, este estilo no ha dejado de sorprendernos.

Introducción

Se desconoce exactamente en qué fecha se comenzó a llevar a cabo una tradición decorativa tan llamativa con el azulejo como protagonista, pero lo que sí es seguro es que a día de hoy son cientos las iglesias, edificios oficiales, apartamentos, estaciones de tren... que llenan de color y alegría el país luso gracias a esta tradición milenaria.

Y si bien los edificios con azulejos más conocidos son los que podemos encontrar en Lisboa, donde se comenzaron a recubrir iglesias y viviendas con esta técnica tras un devastador terremoto a mediados del siglo XVIII, o en Oporto, con los ejemplo de la Iglesia del Carmen o la Capilla de las Almas, también existen rincones más desconocidos pero igualmente bellos.

iglesia valega
Fachada de azulejos de la Iglesia de Válega, concelho de Ovar, Portugal.

Un claro ejemplo es la iglesia de Santa María de Válega, también conocida como Iglesia de Nossa Senhora do Amparo de Válega o, simplemente, como Iglesia de Válega.

Válega y Nossa Senhora do Amparo

La pequeña freguesia de Válega, con apenas 7.000 habitantes, se sitúa a aproximadamente 40 kilómetros al sur de Oporto. Aquí la santa patrona es "Nossa Senhora do Amparo", cuyo nombre se encuentra consagrado en la maravillosa Iglesia de Válega.

La iglesia de Válega no es tan conocida como otros edificios recubiertos de azulejos en Portugal, sin embargo, quienes se acercan a contemplarla suelen coincidir en que es una de las más impresionantes.

Su fachada es simplemente espectacular.

iglesia valega azulejos
Detalle de los azulejos en el interior de la iglesia de Santa María de Válega, en Ovar, Portugal.

Y la iglesia no solo es impactante por fuera... en su interior los paneles de azulejos que retratan pasajes bíblicos de la religión católica también lucen impolutos.

Promoviendo la fe a través del azulejo

En la Edad Media, como la mayoría de la gente no sabía leer ni escribir, una forma de aprender pasajes bíblicos era a través de imágenes e iconografía. Incluso en la historia más reciente Portugal, de los siglos XIX y XX, todavía había muchas personas analfabetas.

Con estos antecedentes, hay una leyenda que dice que la Iglesia de Válega se levantó para que, en un momento en que la gente no sabía leer ni escribir, pudiese descubrir a través de imágenes en azulejo las tradiciones más grandes y los pasajes más conocidos de la tradición cristiana.

El objetivo era claro: impresionar a los devotos y aumentar su fe y, en este caso, hacerlo de una manera sublime y hermosa.

Por otro lado, algunos de los paneles de azulejos fueron ofrecidos por personas adineradas quienes, por lo tanto, aumentaron su estado e influencia.

La iglesia

La iglesia de Santa María de Válega forma parte de la ruta de las Iglesias de Azulejos y, en su interior, se pueden dar cita alrededor de 3.000 fieles a la vez.

Su fachada, orientada al mar, cuenta con la imagen de la santa patrona de Válega, Nossa Senhora do Amparo, esculpida en piedra de Ançã.

La iglesia se encuentra frente al cementerio que una vez sirvió como cementerio parroquial. A día de hoy es el cementerio de Válega.

iglesia valega interior
Interior de la Iglesia de Válega.

En el interior de la iglesia se alzan hasta cinco altares con un estilo único. En ellos se puede observar la sobriedad de sus líneas, pudiendo ofrecer una notable idea de un autor o autora sin alardes de pretenciosidad, pero sí dotado de un exquisito gusto por la buena estética. También llama la atención el retablo, del siglo XVIII, y una pila bautismal con un siglo más de antigüedad.

En cuanto a los azulejos, como comentábamos anteriormente, tantos los de fuera como los de dentro representan pasajes bíblicos de la Iglesia Católica.

Inicios complicados

Los inicios de la Iglesia de Válega no fueron fáciles.

Según se narra en "Válega: Memória histórica e descritiva", fue un 25 de abril de 1788, con el edificio ya prácticamente terminado y a punto de inaugurarse, cuando se desató un incendio que redujo a cenizas dos altares con sus tribunas y retablos de excelente talla y buen gusto.

Cementerio parroquial

Más recientemente, en la década de 1980, durante trabajos de conservación de la iglesia, se descubrieron cerca de la entrada, bajo algunas baldosas de piedra, antiguas tumbas, y es que la iglesia actual de Válega sirvió durante mucho tiempo como cementerio parroquial.

Desde la puerta principal, se contaron nueve líneas transversales de tumbas para adultos, cada línea con un promedio de 10 tumbas separadas por pequeñas paredes. Estas tumbas de adultos eran seguidas por las tumbas de los niños y, en la zona de la capilla principal, se hallaron las tumbas de abades y otros eclesiásticos.

Información práctica

Válega forma parte del concelho de Ovar, en Portugal. Se sitúa a 5 kilómetros del pueblo de Ovar, a 33 kilómetros al norte de Aveiro y a 40 kilómetros al sur de Oporto.

Horario de entrada: la iglesia abre de 14:00 a 19:00 de lunes a viernes. Los sábados de 14:00 a 20:00 y los domingos de 8:30 a 17:00 con una pausa entre las 13:30 y las 15:00.
Precio de la entrada: entrada gratis.

Entradas relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir