Los Mármoles del Diablo, en el norte de Australia

Los Mármoles del Diablo, o Karlu Karlu, como se les conoce por los aborígenes locales warumungu, son un conjunto de enormes rocas de granito esparcidos a través de un valle poco profundo, a 100 kilómetros al sur de Tennant Creek, en el Territorio del Norte, Australia. Se sitúan como uno de los símbolos más reconocidos del interior del Australia.

Formados por la erosión durante millones de años, los Mármoles del Diablo tienen tamaños que van desde los 50 centímetros hasta lo 6 metros de diámetro. A pesar de que parecen haber sido cuidadosamente colocadas, o tal vez traídas aquí por inundaciones o glaciares, la verdad es que estas rocas emergieron del subsuelo.

Mármoles del Diablo se creó hace millones de años, cuando sus rocas emergieron de debajo del suelo instalándose en un capa sólida de la corteza terrestre. Después de algún tiempo, las fuerzas tectónicas fracturaron algunas de estas rocas en grandes bloques cuadrados. El desgaste por el agua y el viento, redondearon sus bordes y las convirtieron en las rocas lisas que podemos ver a día de hoy.

Los Mármoles del Diablo tienen gran importancia para los pueblos aborígenes y están protegidos por la Ley de Lugares Sagrados del Territorio del Norte. En la mitología aborigen de los Mármoles del Diablo, estas rocas son huevos de serpiente.