Monasterio de la Gran Laura en Athos, Grecia

El monasterio principal de la república monástica del Monte Athos, el Monasterio de la Gran Laura (Gran Lavra), se encuentra en el extremo sureste de la península, en las laderas de la montaña sagrada.

El segundo nombre de este monasterio es San Atanasio, en honor a un nativo de la Capadocia turca, quien fundó el monasterio en el año 963.

El Gran Laura es el monasterio más venerado de Athos y, a menudo, de toda Grecia.

gran laura
Vista aérea del complejo del monasterio de la Gran Laura en Athos. En el centro, de rojo, se sitúa la iglesia principal, lugar en el que está enterrado San Atanasio.

El monasterio realmente merece esta posición especial gracias a una larga y gloriosa historia, a su vasto territorio con una magnífica iglesia catedral en honor a la Anunciación y a una gran colección de reliquias de santos, iconos milagrosos y regalos de emperadores de Bizancio.

Atanasio, el fundador

San Atanasio de Athos, el fundador del monasterio de la Gran Laura, el cual se situó como el primer monasterio de Athos, tanto histórica como jerárquicamente, se hizo famoso en Constantinopla como un predicador entusiasta y mentor del emperador Nicéforo II.

Posteriormente Atanasio tomó la tonsura monástica y en 958 acudió a Athos.

Como lugar santo, la península es conocida desde los primeros siglos de nuestra era, sin embargo en aquella época el servicio del Señor se realizaba en sketes separados que, a menudo, sufrían incursiones de ladrones de tierra y piratas de mar. San Atanasio unió los sketes en un monasterio que se llamó la Gran Laura y dedicó su vida a su disposición.

Atanasio murió en el año 1003, junto a otras seis personas que se encontraban trabajando en el complejo del monasterio, cuando fue alcanzado por una cúpula que se desprendió. Tras su muerte, Atanasio fue enterrado en el templo principal del Gran Laura, en el katholikón, hasta donde los peregrinos todavía llegan a día de hoy para venerar sus reliquias.

El monasterio

katholikon
El templo principal del monasterio destaca por su color rojo.

El Gran Laura es un monasterio extraordinariamente hermoso, solemne y brillante. La gran cantidad de edificios que componen el complejo del monasterio de la Gran Laura, crean la impresión como si de una ciudad entera se tratase, aunque en una versión en miniatura.

El Monte Athos también crea un sentimiento especial de proximidad a los mundos superiores.

El monasterio de la Gran Laura consta del templo principal (katholikón), erigido en el siglo X y consagrado en honor de la Anunciación, celdas monásticas y diversas dependencias.

Iglesia principal (katholikón)

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Cúpula de la iglesia dedicada a la Anunciación de la Santísima Virgen María.

El templo principal del monasterio de la Gran Laura se erigió en estilo tradicional de la arquitectura ortodoxa griega, con dos pasillos semicirculares, uno de los cuales contiene la capilla de los Cuarenta mártires de Sebaste, lugar de descanso eterno de Atanasio. El segundo pasillo circular tiene dedicación a Nicolás el Taumaturgo.

El interior del katholikón se encuentra ricamente decorado por frescos del año 1535, obra del famoso pintor de imágenes religiosas Teófanes de Creta.

El color rojo carmín de la fachada del katholikón se ve acentuado por los marcos de las ventanas blancas, gracias a las cuales el edificio brilla como un rubí en medio de la vegetación esmeralda de Athos.

Frente al katholikón se encuentra el cuenco de mármol con agua bendita más grande del Monte Athos, cuya cúpula está decorada con magníficos frescos, siendo custodiados por cipreses que parecen surgir de los mismos cimientos del monasterio.

Otras reliquias

Entre las reliquias más veneradas del monasterio de la Gran Laura se encuentran los iconos milagrosos de la Madre de Dios "Economissa" y "Kukuzelissa", la vara y la cruz de San Atanasio, reliquias de San Andrés, así como fragmentos de la vivificante Cruz del Señor, entre otros.

Recorriendo el Gran Laura en video


Video recorriendo los exteriores del monasterio de la Gran Laura, en el Monte Athos.

En una visita al monasterio de la Gran Laura, vale la pena dar un paseo de aproximadamente una hora hasta el monasterio rumano de Prodrom, bajo el mandato del Gran Laura, para contemplar la asombrosa imagen de Nuestra Señora Prodromitissa, famosa por numerosos milagros.

Según la leyenda, los rostros de la Madre de Dios y de Cristo aparecieron en él por sí solos gracias a la ferviente oración de su pintor.






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