Ruinas del castillo de Brederode, en Países Bajos

El castillo de Brederode, conocido localmente como Kasteel Brederode (o "Ruïne van Brederode" debido a su estado de ruina), se encuentra entre dunas y bosques al noroeste del pueblo de Santpoort-Zuid (municipio de Velsen), en la provincia de Holanda Septentrional en Países Bajos.

Se cree que el castillo de Brederode fue mandado levantar alrededor del año 1282 por orden de Willem van Brederode. Aquel primer castillo constaba de un patio y un torreón cuadrado. Su función era controlar la carretera de paso a la región de Kennemerland.

Aproximadamente en el año 1300, el edificio original fue demolido y en su lugar se levantó un nuevo torreón más grande y fuerte, al que se le agregaron tres torres cuadradas y una redonda en sus esquinas.

Aquel castillo fue asediado y destruido por tropas de Gijsbrecht II van Nijenrode en 1351, sin embargo, las bases del edificio son las que podemos ver en la actualidad.

Entre 1354 y 1426, el castillo de Brederode fue completamente reconstruido sobre los cimientos existentes. Pero el edificio volvió a no tener demasiada suerte. Fue en 1426 cuando guerreros de Haarlem dañaron, principalmente, la parte sur del castillo. Así, los residentes del castillo, los Señores de Brederode, se mudaron al castillo de Batestein (a día de hoy desaparecido) en Vianen.

No fue hasta 1464 cuando se finalizaron trabajos de remodelación e hicieron del castillo de Brederode un edificio habitable de nuevo. En aquella época el castillo pasó a convertirse de un lugar de control de paso, a un hogar con todas las comodidades de la época.

Más tarde, en 1491, la fortaleza fue víctima del saqueo de soldados alemanes y el castillo se deterioró.

Alrededor de 1573, poco después del sitio de la ciudad de Haarlem, las tropas españolas incendiaron el castillo. El fuego provocó que la pared norte se derrumbase y cayese al foso. Sus escombros hoy en día forman una pequeña isla, cubierta de maleza, en el propio foso.

Posteriormente solo los edificios del patio fueron habitables, pero después de 1600 también cayeron en decadencia.

El último integrante de la familia Brederode, Wolfert van Brederode, murió en 1679, por lo que el castillo pasó a manos del Estado.

En los dos siglos y medio que siguieron, desde 1600 hasta 1862, las ruinas del castillo de Brederode desaparecieron lentamente bajo las arenas de las dunas. Solo pequeños pedazos de pared sobresalían de la arena.

Desde 1862 hasta 1903 se excavaron e investigaron las ruinas del castillo. También entre 1986 y 1988 se investigó la historia de la construcción del castillo.

En la actualidad, el castillo de Brederode se puede visitar pagando una tarifa. A día de hoy, las ruinas del castillo están registradas como "monumento nacional".

Recorriendo las ruinas del castillo de Brederode