U-118, el submarino alemán de Hastings

En la mañana del 15 de abril de 1919, los habitantes del pueblo de Hastings, en Sussex, en la costa sur de Inglaterra, se despertaron con una visita asombrosa. Un enorme submarino alemán había llegado a tierra justo en frente del popular Queens Hotel. El naufragio del submarino se convirtió en una auténtica sensación, atrayendo a turistas de toda Inglaterra, Gales y Escocia.

El submarino SM U-118 fue encargado el 27 de mayo de 1916, y puesto en servicio en el Atlántico oriental el 8 de mayo de 1918. Cuatro meses después, completó su primera misión satisfactoria, torpedeando y hundiendo el barco de vapor británico Wellington. A principios del mes siguiente, el U-118 hundió su segundo y último barco, el petrolero británico Arca. Posteriormente, el submarino de la Marina Imperial Alemana fue entregado a Francia, entre otras embarcaciones, el 23 de febrero 1919 para ser despiezado.

El U-118 estaba listo para ser trasladado a Francia, donde sería disuelto como chatarra. Sin embargo, en las primeras horas del 15 de abril de 1919, mientras estaba siendo remolcado a través del Canal Inglés hacia Scapa Flow, parte de su casco se rompió durante una tormenta. El barco encalló en la playa de Hastings, en Sussex, aproximadamente a las 12:45 am, justo en frente del Queens Hotel.

Inicialmente hubo intentos de retirar el buque siniestrado, con tres tractores intentando reflotar el submarino y con un destructor francés tratando de romper la nave completamente usando sus cañones. Estos intentos, sin embargo, no tuvieron éxito, y la proximidad del submarino a la playa pública y al Queens Hotel disuadieron el uso de las fuerzas explosivas.

Mientras tanto, había un flujo constante de visitantes a Hastings para ver el buque varado. Viendo una oportunidad en la recaudación de fondos, el buque fue puesto a cargo de la estación de guardacostas local, y el secretario del Ayuntamiento de Hastings empezó cobrar una pequeña cuota a la gente que quería subir a la cubierta del submarino y visitarlo por dentro. En dos semanas, la ciudad recolectó casi 300£, unos 428 euros (13.100£ en 2015, unos 18.700 euros), que ayudaron a financiar un evento para dar la bienvenida a las tropas que regresaban de la guerra a la ciudad.

Las visitas a la nave sin embargo se redujeron cuando los dos hombres de la guardia costera encargados de mostrar a los visitantes en el interior del submarino, cayeron gravemente enfermos. Inicialmente se pensó que los alimentos podridos en el submarino estaban causando los problemas, sin embargo, a pesar de que las visitas se interrumpieron, las enfermedades continuaron y fueron a peor. Ambos hombres murieron poco después. La causa de la muerte más tarde se achacó a un gas nocivo, posiblemente cloro liberado de bacterias del dañado submarino, que había causado abscesos en los pulmones y el cerebro de los desafortunados hombres.

Aunque fueron canceladas las visitas al interior del submarino, la gente seguía acudiendo a la playa para tomarse fotos junto al submarino. Finalmente, entre octubre y diciembre de 1919, el T-118 se despiezó y se vendió como chatarra.

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