Cementerio de los Mártires de Longhua, en Shanghái, China

Como un extraño remanso de paz en medio del agitado ritmo de vida de Shanghái, el cementerio de los Mártires de Longhua se sitúa como un monumento a todos aquellos que perdieron su vida a manos del régimen de Kuomintang, dirigido por Chiang Kai-shek.

Durante las décadas de 1920 y 1930, el lugar que ocupa el actual cementerio de los mártires de Longhua fue el hogar de la prisión del Kuomintang. Allí, en la prisión, cientos de comunistas fueron ejecutados en un intento de acabar con el movimiento comunista.

El cementerio es un monumento a la lucha por el comunismo antes del establecimiento de la República Popular China en 1949.

Quien visita hoy en día el cementerio de los Mártires de Longhua, visita el mismo lugar que fue utilizado como terreno de ejecución real años atrás. Los visitantes aún pueden ver la antigua prisión, además de varias esculturas y un "Memorial Hall".

Los terribles hechos en los terrenos del cementerio de los Mártires de Longhua no terminaron con la infame prisión. Durante la Segunda Guerra Mundial, este mismo lugar fue el sitio de un vasto campo de internamiento japonés. Muchos occidentales también fueron prisioneros en el campo.

El cementerio de los mártires de Longhua se inauguró oficialmente el 1 de julio de 1995.

A día de hoy, muchos lugareños y turistas eligen este sitio, por extraño que parezca, para pasar la tarde. La ubicación es tranquila y silenciosa en medio del frenético bullicio de Shanghái.

Los jardines están muy bien cuidados y emiten las "vibraciones" de un jardín de estilo chino.