Rocódromo en la iglesia, así es Frederiksholm en Copenhague

"Acércate al cielo", así es como se anuncia el rocódromo de la iglesia de Frederiksholm en Copenhague, Dinamarca.

A la altura del número 8 de Louis Pios Gade, en el barrio de Sydhavn de Copenhague, a apenas 5 kilómetros del centro de la ciudad, se puede encontrar una peculiar iglesia única en el mundo.

Construida a principios del siglo XX y conocida como Iglesia de Frederiksholm (Frederiksholm Kirke), desde 2014 tiene algo que la hace diferente a todas las demás iglesias del planeta.

Introducción

La historia de la iglesia de Frederiksholm comienza en el año 1922, cuando se separó de la antigua parroquia Valby (Valby Sogn) para convertirse en la "parroquia de Frederiksholm".

No fue hasta el 31 de agosto de 1952 cuando se inauguró el nuevo edificio que dio cabida a la actual iglesia de Frederiksholm. Los arquitectos del proyecto fueron Adam Møller y HP Koch.

Pero si hay algo extraordinario y que llama la atención de sobremanera de la iglesia de Frederiksholm es, sin duda, la pared de escalada que se extiende sobre su torre.

Rocódromo

El domingo 7 de septiembre de 2014 fue el día elegido para inaugurar la primera pared de escalada de la iglesia Frederiksholm, algo insólito hasta ese momento.

Con una altura de 15 metros, hizo que niños, jóvenes y adultos pudieran escalar en diferentes grados de dificultad, e incluso descender en rapel desde lo más alto de la torre de la iglesia.

Sin embargo, resultó que era solo la primera etapa...

Unos meses después de su inauguración, tras el éxito que tuvo en sus primeros días, se llevaron a cabo trabajos de mejoras y ajustes.

Así, en 2015 se inauguró el nuevo rocódromo con una altura de 18 metros. Obtuvo un aspecto completamente nuevo y se agregaron distintos desafíos de escalada, luciendo como lo hace a día de hoy.

Puede sonar algo extraordinario el instalar un rocódromo en la torre de una iglesia, pero realmente tiene mucho sentido. La iniciadora del proyecto y ex párroca de Sydhavn, Helene Ferslev, explicó cómo surgió este proyecto.

Desafío mental, espiritual... y físico

Helene afirmó que, cuando se acude a la iglesia, es necesaria la sensación de ser desafiado constantemente. Y si bien el acudir a la iglesia ya implicaba desafíos mentales y espirituales, quiso que el desafío físico también estuviese presente.

"La fe se trata fundamentalmente de confianza y esperanza, y con el muro de escalada ahora puedes desafiar tu coraje y tu confianza. El desafío físico que te da el rocódromo recuerda al movimiento que haces por dentro cuando crees. Si quieres creer, debes atreverte a levantar los pies del suelo en tu búsqueda de respuestas y sentido en algo que es más grande que tú".

Idea del rocódromo

Helene Ferslev tuvo la idea de construir una pared de escalada tras un viaje que hizo a Córcega.

"Cuando te cuelgas de un delgado arnés de nailon en el aire y notas el enorme cielo sobre ti y el profundo abismo por debajo, sientes que está estás colgado entre los cielos y la tierra. Obtienes una experiencia física de lo que significa tener confianza y esperanza de que hay algo que te anima. Dependes profundamente de aquellos compañeros y compañeras con los que escalas. Os comprometéis a cuidar de los demás del grupo y a fortaleceros y apoyaros mutuamente en la escalada. Es muy similar a la caridad que el cristianismo exige de uno mismo".

Un reto

El objetivo del rocódromo de la iglesia de Frederiksholm es involucrar y desafiar a los ciudadanos del vecindario.

"Tenemos muchas actividades que le hablan al cerebro y al corazón, pero también queremos desafiar a las personas que vienen a la iglesia de Frederiksholm a conectar el cuerpo y el espíritu. Las personas deben tener la oportunidad de sentir el desafío que es la fe, y con este proyecto intentaremos darle una expresión física a la fe, para que no sea solo algo que nos ocupe intelectualmente".

Creando comunidad

"Una pared de escalada en la torre de nuestra iglesia no es para decorar la iglesia ni para llamar la atención", dijo Helene Ferslev.

"Es mucho más profundo. Se trata de un nuevo símbolo de fe. No reemplazaremos los servicios y rituales con un desafío físico. Complementaremos las acciones de la iglesia con algo más y algo diferente. Mantenemos la reflexión teológica sobre lo que significa ser humano y estar pendiendo entre el cielo y la tierra.

Helene también explicó la forma en la que tratan de crear comunidad:

Al mismo tiempo, también es nuestra intención crear comunidades a través de las divisiones sociales y culturales. Cuando te paras al pie del rocódromo, todos somos iguales. Se necesita el mismo coraje y la misma confianza para volar, sin importar quién seas. Y esto tiene mucho sentido en la parroquia de Sydhavn, que es un lugar muy diverso en el que estar. Nos gusta crear actividades que generen comunidades de confianza, donde el enfoque no esté en las diferencias con los demás, sino en el cuidado y la preocupación por los demás".

Apoyo

Desde su inauguración, el consejo parroquial de la iglesia de Frederiksholm se ha mostrado entusiasmado con las oportunidades que ofrece el rocódromo para la iglesia y el área local.

Y no solo los vecinos de de Sydhavn se han beneficiado de las nuevas oportunidades de escalada. Niños, jóvenes y adultos de toda la diócesis de Copenhague han tenido la oportunidad de practicar la escalada en la torre de la iglesia de Frederiksholm.

El rocódromo es de particular de éxito entre los locales, sin embargo también recibe a grupos y visitantes de todas partes del mundo, quienes pueden reservar su hora para una experiencia única.

Fuente de la información: Parroquia de Sydhavn.